Rompiendo el techo de cristal
Fran Bubani es la primera investigadora trans del Conicet. Tecnóloga, científica del Centro Atómico de Bariloche, Fran rompe los moldes y hace de su carrera un ejemplo.
Por Marcelo Parra
Esta nota no debería ser escrita. Si la humanidad fuera un lugar de gente respetable, esta sería la No nota.
Nunca jamás hubiese visto la luz. Pero como ya sabemos, nos falta mucho todavía para dejar de ser un cambalache. Así, en nombre de la moral, nos metemos en la cama de otros. De manera obscena miramos aquello que no nos corresponde ver.
Opinamos, analizamos, censuramos y hasta aceptamos lo que otres sienten o deben sentir. Ahí la nota cobra sentido. Porque es la historia de alguien que rompió el techo de cristal. Alguien que pudo, frente a lo escrito y a lo no escrito, avanzar tras su destino y militar su camino.
Hablamos de Fran Bubani, tecnóloga, científica y desempeñando sus tareas en el Centro Atómico Bariloche. La primera investigadora trans del CONICET y la primera persona trans en incorporarse al Instituto Balseiro.
“Yo nunca había pensado en hacer la transición de género. Como la ingeniería mecánica es un área que todavía está muy dominada por varones, me parecía imposible poder hacerlo. Pero en un momento no pude más” cuenta Fran.
Criada en Belo Horizonte, nunca dudó de su vocación. Estudió Ingeniería Mecánica. Logró la Maestría, el Doctorado y el Post Doc.
En medio de todo esto conoció Bariloche y en 2016 se vino a investigar a nuestro país. Aquí decidió pasar por la cirugía de reasignación de género y obtener su documento con la identidad autopercibida. Tenía 39 años y dejó de lado el teatro en el que vivía.
“Me sorprendió mucho ser la primera que pidió el cambio, después de ocho años de la Ley de Identidad de Género” declara y agrega “Tuve buenas sorpresas, como me pasó en el CONICET. La manera en la que se manejó la parte administrativa fue un ejemplo de cómo deberían funcionar las instituciones de Argentina –asegura-. Di la noticia cuando tenía fecha de la cirugía, porque tenía que tramitar la licencia médica para operarme, y no tuve ningún tipo de problema. Después, cuando fui a presentar mi nuevo DNI, también: todo fue sin cuestionamientos ni barreras, inmediato, como corresponde. Fue espectacular”.
Pero también cuenta que alguna gente que la conoció antes, todavía no acepta que ella no quiera vivir más en la hipocresía.
Durante la pandemia tuvo que soportar que en una clínica de la ciudad la llamaran por su nombre anterior. Acostumbrada a la lucha no tardó en hacer saber la situación. Por ella y por otres. La clínica terminó pidiendo perdón por la escena. “Yo tenía una carga muy grande por no ser auténtica. Eso ya está”, dice. “Presentarme y vivir como realmente soy, tener el reconocimiento de mi identidad de género autopercibida, es muy importante, me da muchísima calidad de vida, me hace sentir mucho mejor. Aunque sigue siendo una lucha constante el tema de que algunas personas lo tomen en serio, respeten y cumplan el marco legal”.
En relación a su trabajo actual en el Centro Atómico Bariloche, explica que se dedica al estudio de materiales. “La ingeniería de los materiales está en todas las áreas de la vida cotidiana: en la ropa que usamos, en los materiales que se usan en salud, dentro del cuerpo humano, en prótesis, hasta en los autos y los aviones. Quienes nos dedicamos a esto podemos ayudar en distintos desarrollos que tienen impacto en la vida cotidiana”, explica Bubani. “En mi caso particular, estudio e intento predecir cómo se van a comportar los materiales en un proceso de fabricación o en una máquina como puede ser un avión, o un auto. Es algo que permite garantizar que una pieza va a ser segura”. También señala que el ambiente científico es Patriarcal y Machista y que a su entender tendrán que pasar varias generaciones antes de terminar con este tipo de discriminación. A veces las historias tienen un final feliz. Fran Bubani le encontró la vuelta.-
Es como dice al principio si la sociedad pensará diferente ( por suerte no es toda .Una parte) seria la No nota. Hay que seguir facilitando todo y que realmente se materialice lo que es natural y no extraordinario. Lo extraordinario tiene que ser que tod@s/ es convivamos en la aceptación sin marcar diferencias. La compañera marcó una diferencia y es el haberse desarrollado intelectualmente y ahí tenémos que poner el acento…much@s de l@s que discriminan no aportan nada a la sociedad y se creen con derechos que nadie les otorgó.